MOURN publican “This feeling is disgusting”, primer single y videoclip de su próximo disco.
La banda catalana Mourn, anuncian el lanzamiento de su nuevo álbum “Self Worth”, para el 30 de octubre y publican el primer single y videoclipa “This feeling is disgusting”.
Self Worth comenzó a gestarse en la primavera del año pasado. Por entonces las cosas no iban bien con el baterista. “Estábamos en un momento muy malo: las dinámicas del grupo ya no funcionaban con Antonio. No sentíamos que podíamos escribir un disco con él. No iba más, ya no cuajaba. Al final él se fue”, cuenta Jazz. A lo que Carla agrega: “Creo que su partida era algo que tenía que pasar. Ya no nos entendíamos. Y llegamos al punto en que no era cómodo, ni en las giras ni en los ensayos. Así que fue un cambio muy positivo. Nos dio la tranquilidad que necesitábamos”. En mayo, una vez liberadas del “mal rollo”, Jazz y Carla se refugiaron durante casi una semana en una casita en la montaña, cerca de los Pirineos, en Francia, para empezar a proyectar su próximo álbum. Allí, sin móviles y sin internet, se dedicaron a escribir y a grabar demos. Asomaron nuevas melodías, letras y líneas de guitarra. Y así, con estas primeras canciones, volvieron a Cataluña, donde esperaban Leia Rodríguez, bajista y hermana de Jazz, y Víctor Pelusa, el nuevo baterista. “Lo terminamos de componer los cuatro juntos, a fines de ese verano”, dice Carla. Jazz completa: “Pudimos disfrutar el proceso de hacer un disco durante el verano. Antes eso sólo podía suceder bajo presión”.

La reconfiguración del grupo dio sus frutos. “Trabajamos más en equipo. Nos comunicamos más. Cada una aportó algo en la composición, de una manera mucho más natural. Incluso Víctor–con quien no habíamos tocado mucho– terminó sumando elementos y dándole un aire diferente a las canciones”, dice Jazz. Carla reconoce que fue el ambiente ideal para dar un paso más: “Creo que antes no acabábamos de ser nosotras mismas. Y ahora nos hemos soltado. Hemos sacado cosas que estaban ahí, por salir; cosas que queríamos decir y tocar”. Estas trabas eran parte de los desacuerdos con su ex baterista. Jazz: “Ya no compartíamos del todo los ideales y las maneras de pensar. Sospecho que algunas letras de este disco no le hubiesen parecido bien, y eso habría significado una lucha. Rescato el hecho de ser nosotras mismas con estas canciones, sin nadie que nos juzgue. Pues, para mí, ha acabado siendo el mejor disco que hemos hecho. Porque lo hemos vivido mucho más intensamente, más libres y más a gusto”.
Self Worth, a diferencia de sus predecesores, amplia las reglas y se vale de un método diferente: atender lo que pide cada canción. Jazz: “Antes, en los primeros discos, grabábamos sólo lo que íbamos a tocar en vivo. Decíamos: ‘todo lo que suena aquí será igual a lo que suene en el concierto’. Dos voces, dos guitarras, bajo y batería. Y ya está. Esta vez, en cambio, el plan fue otro: ‘si esta canción necesita un coro de la ostia, lo hacemos; ya veremos en los ensayos cómo nos arreglamos para hacerlo en directo’”. Carla: “Nos entregamos más a lo que necesita la canción. Y jugamos más. Dejamos algunos temas sin voces antes de entrar a grabar; la idea era aventurarnos y cantar luego lo que nos saliera en ese momento. Y eso nos dio más libertad: adaptamos melodías sin limitarnos, porque no estábamos pendientes de tocar”.