Synth-pop oscuro y ultra melódico para un futuro nostálgico.
AUTO SACRAMENTAL presenta “Auto Sacramental” (Triunvirato, 2018), un homónimo EP grabado en Alamo Shock el pasado mes de agosto, con la producción, mezcla y masterización de Guille Mostaza. Con una clara vocación pop, ultramelódico y ultramecánico, supone el salto a cantar en castellano de Jorge Mills, a quien conocíamos por militar en el combo de influencia emocore Rollercoaster Kills y por ser la mitad de los minimal wavers Totale.
Los cuatro temas del EP, dejan referencias sónicas que nos invitan a pensar en la BSO de Drive (Desire, Kavinsky, College) y bandas generacionales (TR/ST o Chromatics), pero también en los modelos en los que se miran todos ellos (OMD, Ultravox, New Order) y en homólogos patrios de la militancia mecánica, a tientas entre el synth-punk doméstico, el pop industrial germánico o el minimal-wave (contemporáneos como El Columpio Asesino, El Último Vecino, Fasenuova o Triángulo de Amor Bizarro; y ochenteros como Esplendor Geométrico, Trúpita o Aviador Dro).
Auto Sacramental canta a esa historia nacional que se omite, tan cerca de la memoria histórica mística y ritual, como del sarcasmo historiográfico de la España demente: la sierra madrileña (la de Abantos, El Escorial y el cine de Carlos Saura y que plasma en “Arde” y “Sierra Norte”), la mirada al peligroso poder de la nostalgia como arma y droga (como canta en “Safari”) o a la canción que le dedica a Corintio Haza, curandero y judío sefardita que vivía en Tánger y entregó un talismán a Franco antes de embarcarse en la Guerra civil (como canta en “Talismán”).