Estamos ante un disco escrito a corazón abierto y grabado a pulmón. ManuteBol, que empezó siendo un proyecto musical formado por Manuel Solís (guitarra, voz y composición) y Albert Gimeno (guitarra y arreglos), ahora es una banda a la que se han sumado Santi Bernal (batería), Luis Goodfaith (bajo), Jorge Arias (guitarra). Acaban de lanzar su primer EP homónimo y muy pronto lo presentarán en directo en diferentes salas del territorio nacional.
El disco ha sido autoproducido por Manuel Solís y Albert Gimeno con la colaboración de Armando Alba (Bogotá, Colombia), realizando la labor de ingeniero de sonido y productor. Algunas de sus canciones fueron compuestas en ciudades como Atlanta o Miami, cuando Manuel Solís (compositor de los temas) vivía en Estados Unidos, trabajando allí como creativo publicitario. Esas mismas canciones se empezaron a grabar en Valencia y otras fueron grabadas en Bogotá, donde fueron todas terminadas y mezcladas en el estudio de Armando Alba.
El EP lo componen 5 canciones, que buscan traducir experiencias personales, estados de ánimo o sentimientos universales en letras y melodías que puedan conectar con el público amante del pop rock independiente y la música en general. Para no gritar, la canción que abre el disco, es una reflexión sobre el oficio de hacer canciones y el refugio que supone la creación para quienes las componen. Un canción directa y urgente, con guitarras potentes y melodías rabiosas. Náufrago es una canción con sonidos que buscan atomósferas oníricas y envolventes, para expresar ese viaje interior que hacen las personas cuando su relaciones amorosas naufragan. Budapest se trata de una canción apasionada, con guitarras que transmiten esa fuerza en cada golpe de acorde. Triste canción, la primera compuesta para el proyecto, trata del desamor, pero también de otras canciones de amor y desamor, haciendo un metalenguaje de la música como herramienta de expresión para gestionar ese tipo de emociones. Miami Beach, quizá la más festiva, enfrenta encuentros delirantes entre amigos con el problema de la ley mordaza que estamos sufriendo en España, donde muchos artistas están siendo juzgados e incluso encarcelados solamente por su forma de pensar.
