Lo nuevo de The Ting Tings me suena a todo menos a ellos. Es cierto que han pasado casi 10 años de su debut “We started nothing” en el que incluían grandes temas que todos conocemos como “Great dj” o “Shut up and let me go”, y esta trayectoria da para muchas cosas, incluso para descubrir nuevos sonidos. Pero empiezo esta reseña diciendo que echo de menos la frescura de esas canciones pegadizas y bailables a la par que “indie” de ese primer disco.
Ya el título de su nuevo trabajo, “The black light” nos deja entrever de qué palo puede ir, pues el primer adjetivo que te viene a la cabeza según comienza el primer tema “Estranged” es “oscuro”. Y sí, es porque este sonido es bastante más oscuro de lo que nos tienen acostumbrados.
Y no se queda en algo puntual, si no que los demás cortes dejan dilucidar los nuevos aires de la banda. Se trata de ocho canciones donde podemos reconocer lo que podría ser un hit en la pegadiza “Blackligh”, con un estribillo que se cuela en la cabeza y una base bailable al compás del drum & bass que envuelve la totalidad del disco. Al igual que “Basement” donde destaca la voz de Katie White y sonidos electrónicos de lo más noventeros como ocurre también en el tema “A&E”.
Desde luego este álbum es una mezcla de sonidos pop/electro/oscuro, donde algunas canciones podrían ser de lo más sonadas desde la radio fórmula y hasta en un atardecer electrónico de una playa mediterránea. Otra canción que me ha llamado bastante la atención es “Fine and dady” ya que veo en ella un poderoso dueto entre Lana del Rey y The XX. ¿Qué opináis?
Por otro lado, he de reconocer que tras varias escuchas sí que podemos apreciar la esencia de la banda en algunos resquicios de los temas, y saborear el ritmo y compás de cada una de las canciones de este “The black light”.
Os invito a que entréis en esta luz oscura que redescubre a unos nuevos “The ting tings”
Bárbara Sanjuán (Bala Swan)