TOMMY 3 BALAS presenta “Maps”, segundo adelanto de su próximo disco.
“Maps” es el segundo adelanto del proyecto de Tommy 3 Balas y en él tiene lugar una fusión indie-pop utilizando un ritmo de batería punk y una dosis de autotune para contar una historia de amor fallida. Después de ir a los bares que ella frecuentaba y no encontrarla, lo único que te queda es ir a ‘Google Maps’, delante de casa de sus padres (así lo dice la canción), donde quedó fotografiada por casualidad. “Maps” es el segundo de cuatro singles que se irán desvelando antes de la publicación del largo, titulado “Hasta Luego” y previsto para enero del próximo año.
Tommy 3 Balas nace de la experimentación con nuevos sonidos de corte indie y enfoque urbano, y una dosis de autotune. En 2019 empieza a probar este nuevo enfoque de hacer música con distintos productores como Kickbombo (Pepe : Vizio, Mi.amargo…), InnerCut (Juancho Marqués, Don Patricio, Cruz Cafuné…) o Pablo Gareta (Natos y Waor, Recycled J, Deva…). Muchos de estos intentos quedan en meros experimentos, que sin embargo le ayudan a ir tallando a lo largo de medio año lo que será la piedra angular del proyecto: Autotune, guitarras y beats electrónicos.
El video que acompaña la canción es una animación de la mano de AJL (by_ajl_) y representa ese viaje a través del navegador web, cruzando una ciudad ficticia inspirada en algún rincón recóndito de Japón, hasta llegar a casa de la protagonista. La ambientación retro-futurista está plagada de detalles (la matrícula de una moto, el número de la casa donde comienza el video, el título de una carpeta en el escritorio o el nombre del restaurante) que no tienen nada de casual. En ellas se incluye por ejemplo el nombre del álbum o representan puntos que, al unirse, forman una historia real de la que el artista ha sido protagonista.
El álbum, con cierta estética californiana y sonidos afines a referencias como Dominic Fike, Yeek, o Bakar, respira verano y nostalgia de relaciones y momentos pasados. Su título representa precisamente eso, cómo vivimos en un constante bucle de vivencias y pensamientos que nos llevan atrás en el tiempo y acaban convirtiendo cada adiós en un hasta luego.
