ROSALÍA cambia las reglas del juego con su nuevo single “Malamente”.
La joven cantaora se revela como artista total: baila entre palos flamencos como una estrella pop, compone nuevo repertorio y asume también en gran medida la producción.
Cuando suceden muchas cosas en escaso tiempo, éste parece que se dilate. Si echamos la vista atrás, tan solo ha pasado algo más de un año desde que la cantaora Rosalía debutaba en disco. Fue como abrir el telón de una gran historia que no ha hecho más que empezar. Aquella joven que deslumbraba entre bambalinas adquiría bajo los focos un insólito protagonismo y entusiasmaba a los más diversos públicos. Había llegado para quedarse. Y con una de las mejores virtudes posibles: no dejar indiferente a nadie.
Sin habernos repuesto aún del impacto, irrumpe ahora con la canción ‘Malamente’. Tan esperada como sorpresivamente inesperada. ¿Tangos flamencos del siglo 21 o enraizado pop urbano? Ambas cosas a la vez. El lado más extremo del que será su próximo trabajo: ‘El Mal Querer’, cuyo inédito contenido, y todavía más flamenco, estrenará en gran parte en la inminente edición del Sónar barcelonés (15 de junio) y, acto seguido, en el festival Cultura Inquieta de Madrid (5 de julio).
Y cuando aún recién descubríamos una vocalista excepcional, Rosalía se revela como artista total. Además de cantar también baila, compone y produce. Si en el aclamado disco ‘Los Ángeles’ renovaba el cante arcaico, ahora confecciona un insólito sonido mano a mano con El Guincho, crucial músico canario de proyección internacional.
